La bata no estéril en la vida del personal médico.

Y tú ¿Ya conoces la importancia de la bata no estéril dentro de un hospital?

La bata quirúrgica es esencial al momento de llevar a cabo un procedimiento que requiera un nivel alto de esterilidad, higiene y asepsia para conseguir la mínima alteración del paciente durante el proceso que se le realice.

Hemos visto las batas quirúrgicas evolucionar con los años, teniendo su primera aparición a finales del siglo XIX e inicios del siglo XX, donde poco a poco comenzaron a tomar relevancia en el mundo médico por el porcentaje de personas que sobrevivían a la operación y al proceso postoperatorio, gracias a la limpieza.

Gracias a la estadística de supervivencia, comenzaron a llevarse procesos de asepsia, como el lavarse las manos, un requerimiento indispensable al momento de realizar un procedimiento médico, ya sea para poder proteger la integridad del paciente como salvaguardar la vida del médico que realiza el proceso.

Por más sorprendente que pueda parecer, el tratamiento médico, las operaciones y todos los procedimientos, se realizaban sin procurar ninguna medida de protección o higiene, tanto de lado de los pacientes como de los médicos, pues la ignorancia hacia las diversas bacterias y enfermedades que se encontraban en la suciedad invitaba a creer que las muertes en quirófano, o por cualquier tratamiento médico, eran algo normal.

Las batas fuera del quirófano

Como es sabido, el ser humano es vulnerable a una infinidad de enfermedades, bacterias, etc., que lo pueden llevar a la muerte, o a pasar un mal rato nada más (gracias a la medicina moderna), por lo que es muy importante protegerse, más si uno fuese a estar en contacto con algún patógeno.

Si planteamos una utilidad mínima de la bata no estéril es, junto con el resto del uniforme médico para cada ocasión y nivel de riesgo, el proteger a la persona que la usa del contacto con bacterias, enfermedades, virus o cualquier patógeno que le pueda hacer daño.

Sin embargo, a diferencia de la bata estéril, no se busca el proteger en su totalidad a la persona a la que se esté atendiendo, pues el nivel de riesgo de contagio o infección que se le presenta al paciente es muy bajo, a diferencia de estar en un quirófano, donde los procesos se realizan en el interior de esta.

La bata no estéril se presenta en muchas ocasiones al tratar pacientes que puedan llegar a ser transmisores de alguna enfermedad, ya sea por contacto de con la piel, partículas que puedan permanecer en la ropa después de un estornudo o tos, o que sea un riesgo potencial es mantenerse cerca.

También lo vemos presente en el personal que aplica ciertas vacunas o medicamentos inyectados.

Así también las podemos ver para aquel personal médico que trata con pacientes que puedan estar expulsando diversas sustancias de su cuerpo que puedan ensuciar el uniforme de uso continuo.

Recomendaciones para el uso de bata estéril desechable

  • Desecharla después de un uso continuo o se ensucie
  • No volver a colocarla después de retirársela
  • Utilizar una nueva en cada procedimiento distinto
  • Utilizar el resto del equipo de protección correctamente
  • Realizar el proceso de colocación conforme a las indicaciones

Las batas médicas no estériles son un insumo básico para hospitales y consultorios, y puedes adquirir las tuyas AQUÍ.

¿Quieres conocer más del mundo de los insumos médicos? Te dejamos otro artículo sobre los “Tipos de mascarillas de protección”.

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